La Ley 35/2015, de 22 de septiembre, de reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación crea en su disposición adicional primera una Comisión de Seguimiento del Sistema de Valoración con el objeto de analizar su puesta en marcha, sus repercusiones jurídicas y económicas y el sistema de actualización previsto en dicha norma.
Las buenas prácticas requieren que las relaciones entre asegurador y perjudicado, y de todos los profesionales que participan en los procedimientos de reclamación de daños personales, estén presididas por los principios de colaboración, buena fe y transparencia (adjuntamos aquí la Guía de Buenas Prácticas actualizadas a febrero de 2019)
En la práctica, la mayoría de las aseguradoras incumple de forma manifiesta dicho código de buenas prácticas, mostrando el más absoluto desprecio hacia los derechos de las víctimas de accidentes pues su infracción no les supone sanción o perjuicio alguno.